CAPÍTULO
XV
THE DARK SIDE OF LOVE
Los
hermanos Ogazawara miraron atónitos la transformación
de su pequeña hermana, y la forma en que miraba a Kenji, como si en cualquier
momento realmente pudiera ser capaz de calcinarlo. El trillizo sin embargo no
titubeó, se transformó en el híbrido que es y encaró a Chiasa. Tenshi,
preocupado por sus hermanos, tomó su forma nocturna también, apostándose en
medio de ambos como listo para contener el ataque de cualquiera de ellos. Min
Jee y Mi Young se pusieron en alerta por instinto también, mirando de hito en
hito a Kenji y a Chiasa. A Tenshi en medio.
—
Tenshi, mejor muévete. Recuerda que debes ver por dos ahora. — Cautelosa, Mi
Young movió la cabeza, indicándole que se apartara mientras ella tomaba su
lugar.
Chiasa
y Kenji se miraban todavía intensamente.
Tenshi
cedió su sitio tras darle la razón a su hermana. Ahora tenía que preocuparse
también por su bebé. Así que se apartó lo suficiente para evitar un golpe o
cualquier ataque. Min Jee se movió sigilosa como su hermana, apostándose junto
a su hermano con la firme intención de hacerle entrar en razón.
—
Kenji, basta.
—
No. Siquiera será cierto que es nuestra hermana.
—
Qué estupideces estás diciendo, Kenji. — Min Jee siseó, ofendida en nombre de
su madre.
—
¿Estupideces? Vamos, omma podría haber conocido a ese imbécil desde antes.
Igual que papá.
—
Cállate de una vez, Kenji. — Siseó de nuevo su hermana, mirando de reojo cómo
el aura de Chiasa comenzaba a crepitar alrededor de ella.
—
Si no quieres estar en medio, solo muévete. Tú también, Mi Young.
—
¡Estás loco, Kenji!
—
¡Sí! — Bramó. Absolutamente fuera de control.
—
¡Kenji! — El llamado de sus hermanas fue en vano, el híbrido se lanzó al
ataque.
Chiasa
movió los labios, y un susurro nació de ellos. El aura que crepitaba a su alrededor
se elevó como una cortina de fuego, más no fue lo único que sucedió, sino que
ráfagas ardientes fueron expulsadas de ésta. Mi Young y Min Jee se
transformaron con la intención de protegerse, pero pronto se dieron cuenta de
que las ráfagas solo tenían un objetivo. Y azotaron el cuerpo de su hermano con
furia.
Kenji
gruñó, tan alto que probablemente las alarmas en el complejo se activarían de
inmediato. Y fue así, porque en el edificio contiguo, el vampiro morocho era el
primero en reconocer el rugido de su hijo.
—
Kenji. — Y correr, transformado en vampiro, de prisa hacia allá.
Mokomichi
le siguió por inercia, para cuando llegaron al salón donde los Ogazawara se
encontraban, Min Jee, Mi Young y Tenshi estaban resguardados en una especie de
esfera vaporosa, niebla que les impedía moverse o salir de la circunferencia.
Pero Kenji y Chiasa estaban enfrascados en una batalla, donde el trillizo
estaba perdiendo.
—
¡Kenji! — El grito del vampiro morocho es instintito.
Sobre
todo porque no consigue ver con claridad a quien ataca a su hijo. Captando solamente la espalda femenina, el largo
cabello café oscuro tan brillante que casi parecía tener luz propia, agitándose
violentamente mientras arremetía contra el trillizo. Lanzarse con la intención
de defender a su estirpe es puro instinto materno,
pero cuando tras interponerse en el camino de la chica, entiende perfectamente
quién es, el morocho vampiro abre los ojos de par en par sin poder dar crédito
a lo que está seguro ha visto.
—
¿Chiasa?
—
¿Mami?
—
¡Chiasa!
El
llamado final es del mismo Mokomichi. Su voz fuerte suena al estruendo de un
relámpago rompiendo en el firmamento. La muchacha no aparta sus ojos de los del
vampiro morocho, se le cristaliza la mirada cual si estuviera a punto de
llorar. Luego finalmente mira a los lados, a sus hermanos puestos a salvo en
una esfera vaporosa que ella mismo invocó. A su hermano tirado en el piso,
bufando como un lobo herido todavía lleno de furia. A su progenitor con
incrédulos ojos. A su papi mirándole
severamente.
—
¿Papi?
—
¡Hayami no es tu padre! — Kenji insiste, rabioso e incapaz de pensar con
claridad. Cegado de orgullo, de dolor, de impotencia. De una tormenta de
emociones que amenaza con hacerle perder la cordura.
E
intenta levantarse y arremeter de nuevo. Ya no contra la Chiasa adulta que
desconoce, sino contra el hombre que ha provocado todo esto. ChangMin está
descolocado y no reacciona a tiempo, Kenji escapa de su protección y embiste en dirección al japonés. Mokomichi se queda
quieto en su lugar, le espera dispuesto a dejarle descargar toda esa ira que le
arde en las entrañas.
Pero
Chiasa no piensa igual. Y con un solo susurro, de las palmas de sus manos
surgieron hilos plateados que se dirigieron a gran velocidad hacia el trillizo.
—
¡Basta, Chiasa! — Mokomichi ruge de nuevo.
Y
es la potencia de su voz, el tono autoritario envuelto en calidez paternal el
que sorprende a la bruja, sus ojos de fuego se apagan y los hilos se desvanecen en polvo antes de alcanzar su
objetivo. La silueta adulta se pierde también, y la pequeña Chiasa vuelve a
aparecer, solloza un par de veces y justo cuando su hermano da el primer golpe
al teriántropo, la pequeña rompe en llanto.
—
Chiasa. — El vampiro morocho suspira, se acerca a abrazarle y entiende que no
tiene más remedio que dejarlos.
Aunque
le duela el corazón mismo al ver la furia con que Kenji golpea a Hayami, o cómo
este se deja masacrar temerario. Min
Jee y Mi Young chasquean la lengua, y cuando finalmente la esencia del hechizo
de Chiasa se desvanece también, se lanzan al frente, usando sus espadas para
contener las poderosas garras de su hermano.
—
¡Detente ya, Kenji! — Rugió Min Jee. Aunque Mokomichi tampoco era su persona
favorita, ella no podía evitar que su camino se cruzara con el de su madre.
—
¡Muévanse! — Blasfemó el muchacho.
—
Min Jee, Mi Young…
—
¡Ni una palabra! — Rumió Mi Young a Mokomichi. — ¡La familia no pelea!
El
teriántropo buscó algún punto vulnerable en el trillizo para derribarle, lo que
fuera antes de que la pelea entre hermanos se alargara. Por su causa. Pero
cuando lo vio, y estuvo por moverse, quien detuvo todo fue el mismo ChangMin.
Que de un puñetazo había mandado al suelo a su hijo.
—
Suficiente, Kenji.
—
¡Já! Tardaste en meterte, omma. —
Siseó, escupiendo sangre. La misma mancha carmín que tenía por todo el cuerpo,
rasguños y golpes que había obtenido de su corto enfrentamiento con Chiasa y
sus ataques mágicos.
—
¿Eso crees? ¿Entonces qué, Kenji? ¿Me aparto y veo cómo mis hijos pelean como
si fueran enemigos?
—
¡Ellas solo tenían que apartarse! — Bramó, sus ojos centelleando. Su sangre
hirviendo.
—
Tus hermanas solo querían detenerte. El odio que tienes hacia Hayami es
injustificable, Kenji.
—
¡Intenta usurpar…!
—
¡Él no usurpa el lugar de Kenryu! Entiéndelo, hijo. Nadie puede ocupar el lugar
de tu padre. Ni en mi corazón ni en el tuyo o el de tus hermanos.
—
¿En serio? ¿Y por qué Chiasa le llama “papi”?
— Sonriendo con sorna, el trillizo se levantó, sintiendo que le dolía cada
parte de su cuerpo. — ¿Quieres expulsarme del clan, omma?
—
De qué demon…
—
Esa será la única forma en que mi ira se consuma.
—
Kenji. — El vampiro morocho suspiró. Sin saber de qué otra manera comunicarse
con su hijo.
En
ese momento también han arribado Jaejoong y Yunho, así como Derek y Reid.
Aunque antes ya habían visto en las cámaras lo que estaba sucediendo. Junsu y
Yoochun asomaron el rostro sin saber cómo intervenir.
ChulSoo,
sin embargo, dio un paso dentro del salón.
—
Kenji. — Y llamó a su amante con voz firme.
Los
ojos rabiosos del trillizo viajaron de inmediato hacia el gemelo Park. Y un
tirón en la boca del estómago le aguijoneó con culpa. Puede ver el enfado de su
amante, y la decepción en sus ojos negros.
—
Ven conmigo.
—
No ahora, ChulSoo.
—
Sí, ahora Kenji. O te juro que me iré lejos, y nunca podrás conocer a tu hijo.
—
No te atrevas a amenazarme con eso, ChulSoo.
—
Entonces ten un poco de conciencia y ven conmigo.
El
trillizo rumió entre dientes, pero siguió a su joven novio fuera del salón.
Yunho, Junsu, Yoochun y Derek dieron media vuelta, no necesitaban meterse más
de momento. Reid acompañó a los jóvenes fuera, mientras Jaejoong se acercaba a
ChangMin y su sobrina.
—
¿Ella está bien?
—
Solo está dormida. Tal vez porque lloró, o por esa extraña forma en que se
convirtió en adulto durante algunos minutos. Pero solo duerme, hyung.
—
ChangMin, hay que llevarla a tu habitación.
—
Sí. — Cargándole en brazos, el vampiro morocho también se encaminó fuera del
salón, junto a su hermano. Pero en el umbral volvió la mirada. — Hayami.
—
¿Sí?
—
No te vayas. — Dijo, esbozando una sonrisa triste que de todas formas pesó en
el corazón de ambos. — Vamos a solucionar esto, ya verás. Mi Chiasa es buena
niña, y todos mis hijos también. Vamos… — Aclarar la garganta y sentirse un
poco avergonzado de que su hermano escuche lo que dirá. — Vamos a ser la
familia que Chiasa y Kenryu quieren que seamos, Hayami.
Mokomichi
sonrió. Quizá no tenían confianza en esos momentos. Pero sí, está seguro de que
podrán llegar a serlo. Porque quiere al vampiro morocho. No, porque puede
amarle, y porque su corazón aunque acongojado y perdido sin las memorias de su
pasado, todavía es capaz de amarle, de latir frenéticamente y esperar,
impacientemente, por la confianza del corazón del vampiro morocho.
—
No me iré, ChangMin. Estoy aquí para apoyarte.
El
vampiro pelioscuro aclaró la garganta, visiblemente incómodo en el medio. Luego
vio las heridas del teriántropo y se ofreció para curarle, pero Mokomichi
desistió de su oferta.
—
Tengo suficiente con la ira de Kenji, no quiero provocar en lo mínimo la del
Diurno. — Finalizó su argumento, antes de tomar el camino contrario en el
pasillo.
Algunos
guardias en el complejo cuchicheaban en los alrededores, y Mokomichi estaba
seguro de que algo así sería difícil de contener dentro. Luken terminaría
enterándose de todo muy pronto. Y él necesitaba estar preparado para
enfrentarlo y proteger al Clan.
—
Necesito entrenar, y despertar mis genes cambia-formas.
— Dijo para sí, apresurándose fuera del complejo. Listo para encontrarse de
nuevo con Nima.
…
Cuando
Hyun Ki se enteró de lo sucedido entre los hermanos Ogazawara, su primer
pensamiento fue ir y enfrentar a Kenji. Pero de inmediato lo desechó, quien le
necesitaba era su novio. Y supo, por
Reid, que estaba ya en su habitación.
—
Tenshi.
—
Hyun Ki ah.
Ambos
adolescentes se abrazaron en cuanto se vieron. El menor Ogazawara de pronto
sintió que podía temblar y llorar, ser vulnerable y hasta mimado.
—
Estaba asustado, desconocí a Chiasa, desconocí a Kenji. Esos no eran mis
hermanos. — Gimoteó, aferrado al cuerpo de su novio.
—
Lo sé, Tenshi. Puedo imaginar cómo te sentías. Pero ya pasó. — Acariciándole la
espalda, el gemelo Jung no podía ofrecerle más que palabras y el consuelo de su
compañía.
—
Esos no eran mis hermanos, Hyun Ki ah. No puedo creer que lo eran. Mi familia
no puede volverse así. Ya fue suficiente cuando me convertí en enemigo de todos
y casi, casi…
—
Shh, shh. No tienes por qué recordar todo eso, Tenshi.
—
¡Pero puede pasar!
—
Pero no lo hará. No pienses eso. Tus hermanos son inteligentes, Kenji entrará
en razón. Y Chiasa, bueno, Chiasa aprenderá a controlar su increíble poder. Y
tú, tú mi amado Tenshi, tienes que confiar en ellos, y estar tranquilo, por
nuestro bebé. — Dijo comprensivo, mirándole a los ojos con cariño, posando una
mano sobre su vientre plano. Besándole casto. — Confía, Tenshi.
—
Sí. yo, confiaré. — Sorbiendo la nariz, el híbrido sonrió quedito. Apoyando el
rostro en el pecho de su novio, ahí donde los latidos de su corazón realmente
le hacen sentir aliviado y tranquilo. Seguro.
…
—
¿Para qué me has traído aquí? ¿Quieres encerrarme, ChulSoo? Porque una
habitación no va a detenerme.
—
Quiero que hablemos, Kenji. — El gemelo Park dijo con tono audaz, firme.
Sentándose en la cama, pero indicándole a su novio que lo hiciera en una silla
frente a él. — ¿Qué pensabas enfrentando así a tus hermanos?
—
Sabes bien que no estaba pensando, ChulSoo.
—
Bien, al menos lo reconoces.
—
Qué caso tendría no hacerlo. Pero eso no cambia lo que siento.
—
¿Y eso qué es, Kenji? ¿Tal es tu ira porque a tío ChangMin le guste otro hombre?
—
Así que también vas a ponerte de su lado, mh. Genial. — El trillizo bufó,
evadiendo la mirada de su novio y levantándose de su sitio, pateando la silla y
estrellándola contra el muro.
—
Vas a pagar eso. A tío Reid y tío Derek no les hará gracia que andes
destruyendo tantas cosas en su casa.
—
No estoy para bromas, ChulSoo.
—
No estoy bromeando. ¿Tengo cara de estar bromeando?
—
Tch.
—
Ahora dime, honestamente, ¿vas a seguir así? ¿enfrentando a tus hermanos?
¿lastimando más a tu madre?
—
¿Y entonces qué, ChulSoo? ¿Me trago lo que siento y finjo estar súper feliz con
la idea de que mi omma salga con otro
hombre? ¿No tengo derecho a oponerme y exigir respeto a la memoria de mi padre?
—
Tío ChangMin no está faltando a la
memoria de tío Kenryu. Nadie lo está
haciendo, Kenji. Es tu duelo, y puedo darme cuenta de que no lo has superado. Y
creo que está bien, vas a tu ritmo. Pero, no me gusta ver cómo sigues
aferrándote a ese doloroso pasado y te impides a ti mismo a seguir adelante. No
me gusta ver cómo intentas arrastrar a toda tu familia en eso. No me gusta
quién eres cuando te pones así, Kenji.
—
Pero es quien soy.
—
Sí. Lo sé, ya lo has dicho antes. Y sabes, extrañamente así te amo también. Te
amo como eres, pero porque te amo no puedo quedarme de brazos cruzados y ver
cómo hieres a los tuyos. Cómo te hieres a ti mismo. Así que dime, ¿qué quieres?
¿tu omma debería estar solo para
siempre?
—
No ha pasado ni medio año desde que papá murió, ChulSoo. No puedes entender
cómo me siento porque tienes a tus padres a tu lado. Y créeme, no espero que me
entiendas porque no quiero que llegues a pasar por esto.
—
Kenji, tal vez no haga ni medio año, pero sabemos que tío Kenryu no murió entonces. Hacía mucho más. Y de alguna forma,
igual que tío ChangMin y tus
hermanos, lo sabías. Has estado sufriendo su ausencia desde hace más de dos
años, y voy a esperar pacientemente a que asimiles su pérdida. Pero no lo haré
mirando cómo te destruyes o lastimas a los tuyos. Eso no lo haré, Kenji.
—
ChulSoo. — El trillizo suspiró. Todavía se sentía enojado, pero no rabioso.
Comprendió así cuán bien le hacía hablar con su novio. — ¿Puedo sentarme junto
a ti?
—
Depende, ¿vas a dejar de ser tan irascible?
—
Si prometes no amenazarme de nuevo con apartarme de nuestro bebé.
—
No lo haré si prometes hablar, hablar realmente con tío ChangMin. ¿En verdad crees que él lo lleva bien?
El
trillizo bufó. Pero se dejó caer junto a su novio. El gemelo Park sonrió al
verle a su lado. Están haciendo una promesa a su manera.
—
No puedo evitarlo, ChulSoo.
—
Cuando Hayami llegó al Palacio, no parecías tan iracundo.
—
Porque no tenía idea de que se enamoraría de omma. Entonces estuvo ahí para quitarnos la venda de los ojos, y
mostrarnos la realidad sobre la muerte de papá. Llegué a pensar en él como un
aliado.
—
¿Y eso cambió porque siente algo por tío
ChangMin?
—
Ng, para de decirlo.
—
¿Por qué? Esa es la verdad. Kenji, si falto yo, o faltas tú, y nuestro hijo
tiene tu edad, ¿cómo te gustaría que fueran las cosas si otra persona aparece
en nuestras vidas?
—
¿También pondrás ejemplos así? — Preguntó, sonriendo con pesadez. — No puedo
imaginarlo, ChulSoo. Porque no quiero dejarte, ni permitir que me dejes.
—
No es como si yo lo quisiera. Pero es una cuestión hipotética. Quiero que te
pongas en el lugar de tío ChangMin,
que intentes ser empático con él.
—
Es difícil.
—
Entonces, ¿qué hay de tío Kenryu?
¿Realmente crees que él esperaría que le compliques la vida así al hombre que
ama? ¿En verdad crees que desdeñaría que pueda enamorarse otra vez?
El
híbrido gruñó. Sintiendo dolor de cabeza y el ardor en la boca del estómago que
sabe se trata de celos y resentimiento. Sabe que no puede evitarlos. Pero que
puede controlarse.
—
No presiones demasiado, ChulSoo. — Dijo, apoyando la frente en el hombro de su
novio. — Me duele todo, ¿sabes? Chiasa, bueno, la mujer en que se convirtió tan
repentinamente me molió a golpes sin apenas mover sus manos.
—
¿En verdad era Chiasa?
—
Lo era.
—
Tiene poderes increíbles. No la provoques de nuevo. En verdad no quiero
quedarme viudo antes de tener a nuestro bebé.
—
Nh, qué clase de consuelo es ese ¿eh, ChulSoo?
—
Qué. Digo la verdad. No la vi en vivo, pero en los monitores del salón de
control se veía impresionante. Daba miedo.
—
¿Estabas viendo? — El muchacho levantó la mirada, anclando los ojos de su
novio.
—
Todos lo hacíamos. Nos movimos hasta que vimos que enfureció cuando atacaste a
Hayami.
—
Ella realmente lo defiende como si fuera su padre. Detesto eso.
—
Pero, Kenji, tal vez para Chiasa es así. No sé bien por qué, pero Chiasa no
tiene malicia. No llama de esa manera a Hayami para molestarte, o para faltarle
a la memoria de su verdadero papá. No pierdas los cabales por cómo se siente tu
hermana, deberías sentirte feliz de que haya alguien que le inspire ese calor
paternal.
—
¿Feliz? ¿De que no pueda recordar a su verdadero padre? ¿De que no lo nombre?
No puedo, ChulSoo. Sé que Chiasa no tiene malicia, y que soy el problema.
—
No eres el problema, Kenji. El problema es que te consume la ira. Y cuando eso
pasa, yo realmente tengo miedo de perderte.
El
trillizo volvió a suspirar, cerró los ojos y empujando al gemelo Park sobre el
lecho, se acostó a su lado, dejando su rostro sobre su pecho, acariciándole la
tripa.
—
Lo siento. Por ser así, ChulSoo.
—
Solo prométeme que harás tu mejor esfuerzo por hacer las pases contigo mismo.
Después con tu omma. Y que intentarás
llevarte bien con Hayami.
—
Ng, pides demasiado.
—
Es la medida en la que te amo, Kenji.
—
Yo, necesito tiempo.
—
No tomes demasiado.
—
Qué cruel, y demandante, ChulSoo.
—
Soy un chico embarazado, Kenji~.
El
trillizo finalmente sonrió, enredó sus piernas con las del gemelo Park y subió
a su rostro para besarle, lento y dulce. Como si así pudiera calmar todo el
dolor que inconscientemente seguía perforando su cuerpo.
—
Te amo, ChulSoo.
—
Me alegra saberlo. Pero, de ahora en adelante, demuéstramelo mucho más, Kenji.
—
Tan, pero tan exigente.
…
—
¿Chiasa está bien?
—
Sus signos vitales son estables, solo duerme. Debió debilitarse al, volverse
adulta. — El vampiro morocho dijo, con mirada ausente. Así como su hermano sabe
que es cuando está pensando diligentemente.
—
¿Crees que sean sus verdaderos poderes mágicos, ChangMin?
—
No lo sé, hyung. Es decir, obviamente fue muestra de su magia. Pero, si ese es
su verdadero poder, no lo sé. No lo creo.
—
Vas a estar bien, ChangMin.
—
¿Sí? No parece que lo esté haciendo muy bien últimamente. Kenryu se fue y… —
Tragar hondo y ahorrarse las lágrimas. — Mis hijos se enfrentaron de esa manera
hoy, Jaejoong ah. No creo estar haciéndolo nada bien.
—
ChangMin.
—
Gracias, hermano. Sé que quieres confortarme, pero, con los hechos tan
presentes, no hay manera de que me sienta mejor. — Dijo, tragando nuevamente su
llanto, forzando una sonrisa, mirando a su hija dormitar en su lecho. — Aún
así, voy a hacerlo. Todavía no se cómo pero lo haré.
—
ChangMin, ¿qué es lo que no sabes?
—
¿Eh?
—
Es decir, realmente lo sabes. Es solo que no quieres decirlo. Quieres una
familia, se lo dijiste a Hayami. Y esa familia no excluye a ninguno de tus
hijos. Así que lo que tienes que hacer es hablar firmemente con ellos. Con Kenji,
particularmente.
—
Ya lo hice, hermano. Y fue peor.
—
No. ChangMin, cuando hablaste con él, ¿qué hiciste? ¿Qué esperabas?
¿Conciliarte con él? ¿Ceder en algo? ¿Fuiste sincero contigo mismo? — El vampiro
morocho titubeó. Su hermano sonrió con aire comprensivo.
—
ChangMin ah, Kenji no necesita que le hables en su mismo tono. No necesita que
le hables desde tu propio dolor o culpa. Necesitas hablarle con lo que realmente
deseas. Si eso significa que tengas que decirle que sí, que te gusta Hayami, que
estás enamorándote de él y que esperas darte una oportunidad a su lado. Entonces
hazlo. Si quieres que tu familia siga adelante, debes comenzar por hacerlo tú.
—
Jaejoong, no es tan fácil. Dime, ¿has considerado la posibilidad de enamorarte
de otro hombre que no sea Yunho?
—
Nunca.
—
Eso mismo pensaba yo por Kenryu. Creí que tendría una eternidad a su lado, y
solo tuve un par de décadas para amarlo. ¿Cómo crees que me siento al saber que
me gusta Hayami? No puedo enfrentar el rencor de Kenji como lo dices, Jaejoong.
No aún.
—
Entonces tómate tu tiempo. Pero ChangMin, Luken no va a esperar. Necesitas a tu
familia unida.
…
A
un par de días del incidente entre los Ogazawara, Chiasa continuaba durmiendo. Y
el vampiro morocho no podía evitar sentirse intranquilo, o recordar las
ocasiones aquellas en que Kenryu caía en coma tras usar al límite sus poderes.
—
Necesitas dormir, ChangMin.
—
Estoy bien, Reid.
—
¿No confías en mí?
—
No es eso. Quiero estar aquí cuando despierte. Tal vez esté asustada. Tal vez
no recuerde nada, o lo recuerde todo. Quiero estar aquí. — Repitió, sonriendo
cariñoso a su pequeña, que dormía plácidamente en el lecho.
—
De acuerdo. Pero debes alimentarte.
—
Hayami no ha regresado de su entrenamiento con Nima.
—
Entonces, ¿solo te alimentas de él?
—
Sí.
El
inteligente vampiro sonrió suavemente.
—
Me da gusto, ChangMin.
—
¿Eh?
—
Que tengas esa mirada otra vez. Hacía más de dos años que no veía esos ojos en
ti. — Dijo, y sin darle tiempo a más nada, salió de los aposentos del vampiro
morocho.
ChangMin
se sintió azorado por el comentario. Pero tampoco dijo nada ni quiso pensar
demasiado en ello. Apoyó el rostro en el lecho, sujetando la mano de su
pequeña. Y sin darse cuenta, se quedó dormido unos minutos después.
—
ChangMin. ChangMin. ChangMin, despierta.
—
Nh.
—
Vamos, despierta ya. Si no abres los
ojos, te besaré.
El
vampiro morocho despertó sobresaltado. Miró alrededor pero no había nadie. No estaba
ahí el dueño de la voz que había escuchado entre sueños. Miró a su pequeña y suspiró
al verla todavía dormida.
—
Cariño, hazlo por mí, ¿sí? Despierta ya, Chiasa, — Dijo. Y suspiró cuando su
deseo no fue complacido.
Luego
llamaron a su puerta, y él se levantó para atender.
—
Kenji.
—
¿Puedo pasar?
—
Claro.
—
¿Está bien que duerma tanto?
—
Lo está. Es una niña, usar magia como lo hizo debió agotarla.
—
Omma, lo siento.
—
¿Por qué, Kenji?
—
Por todo. Por gritarte, por gritarle a Chiasa. Por, provocar una pelea entre
hermanos. — Dijo, y le tomó casi un minuto poder agregar lo siguiente. — Lo
siento también por perder los estribos con Hayami.
—
Está bien, Kenji. Yo te disculpo. Pero algunas de esas disculpas no son solo
para mí.
—
Lo sé. Pero ¿puedes esperar un poco más? Todavía no soy capaz de enfrentar a
Hayami como si en realidad me sintiera honrado de lo que siente por ti.
El
vampiro morocho sonrió. Y le abrazó con fuerza.
—
Kenji, voy a decírtelo claramente. Hayami me gusta. Más que eso, estoy
enamorándome de él. — El cuerpo de su hijo se tensó al instante. — Sé que no te
gusta escuchar esto. Sé que te hago daño. Pero también tienes que saberlo. Amo a
Kenryu. Él siempre será el hombre que me enseñó lo que es amor de verdad. Y siempre
será tu padre, y el de tus hermanos. El padre de Chiasa. Eso no va a cambiar
nunca, aunque otro hombre entre en mi corazón, ¿entiendes?
—
Yo… — El híbrido tragó hondo, controlándose como ha prometido días atrás. —
Quiero que seas feliz, omma.
—
Soy feliz, Kenji. Teniéndote a ti y a tus hermanos, ya soy feliz.
—
Sí, pero. También quiero que seas feliz enamorándote de nuevo. No podré aceptar
completamente a Hayami al principio, pero con el tiempo, aprenderé a respetarlo
como tu pareja si así lo quieres.
El
vampiro morocho sonrió.
—
Está bien, Kenji. Vamos a hacer todo con la calma debida.
—
Hayami es afortunado, porque tú sientes algo por él.
El
vampiro morocho sonrió, incapaz de responder nada a lo que su hijo ha dicho.
—
¿Mami?
—
Chiasa. — El vampiro de inmediato fue a abrazar a su hija. — Despertaste,
cariño. ¿Cómo te sientes?
—
Chiasa tiene hambre~.
—
Está bien. Vamos a comer algo.
—
Mami.
—
Qué, Chiasa.
—
Chiasa estaba soñando.
—
Con qué, cariño.
—
Moko-chan se encontraba con un señor
que a Chiasa le dio miedo.
—
¿Qué?
—
Moko-chan lo llamó Luken.
…
—
No era nada difícil rastrearlos. Era obvio que estarían con esos vampiros. El complejo
Moore es sofisticado, seguro y bien custodiado. Pero no es impenetrable.
—
Todos en el complejo están conscientes de eso. Así que dime, Luken, por qué
hasta ahora te apareces. Te tomaste tu tiempo, ¿no?
El
loco científico chasqueó la lengua con aire burlesco.
—
Tenía que asegurarme, de que hicieras lo tuyo, Hayami.
—
Oh sí, inteligente sin duda.
Luken
rio con sorna.
—
No tienes idea, ¿verdad? De lo que realmente estaba esperando.
—
La tengo. También soy inteligente, Luken. Querías que completara la transición.
Ahora soy un teriántropo-híbrido. El más poderoso sobre la faz de la tierra. Por
supuesto que sé lo que quieres.
—
¿Crees que te quiero a ti? — Dijo. Y aunque era en tono de cuestionamiento, su
voz destilaba socarronería.
—
Oh, si me quisieras a mí no habrías venido tan directamente. No enviando a uno
de tus clones, Luken. Pero no tendrás lo que quieres.
—
¿Y cómo vas a impedirlo, Hayami? Estás a kilómetros de distancia del complejo. Mi
plan fue perfeccionado. No llegarás a tiempo.
…
La
explosión había sido simultánea en varios puntos del complejo. Los muros
reforzados se sacudieron violentamente, a punto de ceder. Dentro, todos se
habían movilizado.
—
Tienen que irse, Jaejoong.
—
Deberías venir, Derek.
—
Nos iremos. En sentidos contrarios, seremos una pantalla para que ustedes
puedan tomar la ruta segura.
—
No, Derek. Realmente tienen que venir con nosotros.
—
Jaejoong, no es momento para…
—
Reid está embarazado. — ChangMin fue el que dijo entonces.
Continuará.
P R O X I M A M E N T E
CAPÍTULO
XVI
HOW TO LICK THE WOUNDS
Como me encantaría ver en vivo la pelea entre Kenji y chiasa xD
ResponderEliminarEn verdad, me gusta que CM ya reconozca que está interesado en hayami y me fascino su propósicion para que sean una familia *-*
Tenshi y HK son tan lindos, en serio me encanta esa pareja
Quiero a mí JJ embarazado de nuevo xD, se vería tan bonito!
reid embarazado me lo imagino y me da tanta ternura ....
ResponderEliminartenshi y su lado mas sensible me gusta que se exprese asi...
Gracias por la actualizacion :)
ehhhh.....
ResponderEliminarwoooohhh.... me dejaste muda.... bien ahora no dire mucho pero adore el capi... las emociones.... fueron variadas e intensas.... no puedo creer tofo lo que paso.... tengo tantas ganas de leer el sig capi que la semana pasara lenta.....
saludos besos y abrazos a la distancia.... mil gracias por tu tiempo y talento...
matta ne... <3
O por dios!!! Me eprdi el anterior y no lo comente. Pero ya esta leído... Y no manches!!!!!!
ResponderEliminarHan estado súper intensos!!! Ese encontró entre los hermanos ha estado súper fuerte!
Lo buenos s que lograron separarlos. Y ahora resulta que tenemos otras dos parejas embarazadas!!! Omg!!!! 😍
Y tendremos nueva pelea!!! Les llueve a esa familia por todos lados, gracias señorita por el capitulo, ha estado genial!!
Ohh por dios!! Chiasa a ido demostrando el enorme poder que tiene!!
ResponderEliminarLuken de nuevo atacando, yo casi creo que a quien quiere es a Chiasa, espero que no lo logre y no le hagan nada.
Waaaa otro bebé en camino!!! Haber si no dan la sorpresa Changmin, Jae y Junsu.
Gracias!!
GRACIAS! Infinitas gracias al poder divino que hizo coincidir mi último día libre de este mes con esta actu!!
ResponderEliminarAhhhhhh!!! Gritó de la emoción y y y de todo(?) XD este cap fue tan intenso, rayos! Otro embarazado!? Soy la única q se emociona por eso pero a la vez piensa y se siente mal por como seguramente puede estar sintiéndose Jae rodeado de tanto embarazo? TnT Denle más bebés al YunJae por el amor a las nachas de Junsu por favor xD Hahaha
Yah! Enserio Jae desea tanto esa pancita, sería tan lindo que sucediera y esta vez poder ver como Yunho interactúa con el mientras esperan...assjdjsks ok ya xD increíble cap Feli :D
Chiasa se ha convertido en su yo adulto y ha atacado a Kenji y sus hermanos tambien se han unido,pobre Hayami el se llevo la peor parte,pero ChulSoo llego a tiempo y pudo hablar con su novio y ahora Kenji ya no se siente tan lleno de ira por lo de Hayami y ha comprendido que su omma tiene derecho a enamorarse de otro sin que eso signifique que haya olvidado a su papa.
ResponderEliminarAl fin Changmin acepto que estaba enamorandose de Hayami y quiere una familia con el y Kenji no lo ha tomafo tan mal.
Oh no Luken los ha atacado otra vez y Hayami esta con Luken que pasara???
Reid esta embarazado asi que Derek no debe arriesgarse sin pensarlo,pobre Jae el quiere un bebe y al parecer solo el y Junsu faltan por embarazarse
Oh por Dios !!!!! pero que ?..... como...cuando fue que Chiasa, woow !! pero que poder tiene la pequeña, sin lugar a dudas es una chica poderosa tanto para enfrentar a su hermano, que mal que se pelearon pero es entendible que tenían que externar sus ideas lo único malo es que la peor parte se la llevo Hayami, pero a pesar de todo Changmin ya acepto que le gusta y que incluso se esta enamorando de Hayami. Lo resctable del asunto es que Kenji ya hablo con su omma y llegaron a un acuerdo y todo gracias al apoyo y ayuda de Chulsoo.
ResponderEliminarQue pasara ahora con Luken y Hayami, por que están juntos, rayos son tantas preguntas.
Que padre que Reid tambien esta embarazado espero que Derek se vaya con todo el clan ahora mas que nunca deben estar juntos para protegerse.
Gracias Feli, nos leemos pronto :)
:o asombrosa pelea de kenji y chiasa omg pero creo que al menos kenji le sirva para enserio refleccionar sobre su manera de actuar para con moko-chan y Changmin, debe aceptar que Minié tiene derecho a ser feliz ❤
ResponderEliminarFjkSks Reíd esta embarazado awww seguro no era la manera que derek debía enterarse pero ni modo, espero que no les pase nada malo ;;
Gracias por la actu !! ❤
Asdasdasd que intenso!!!! Que bueno que Kenji se de tiempo para que su omma sea feliz :c y más que que necesita terminar su duelo, la pequeña chicas a es muy fuerte Dx espero que ya no haya más pleitos entre ellos.
ResponderEliminarGracias por el capitulo como siempre me dejas con más ganas de saber que pasara
Que capirulo super interesante con la transformacion de Chiasa esa niña si que es fuerte y con todo lo que a sucedido que bueno que Kenji acepte poco a poco a Hayami y que desee que Changmin sea feliz nadie podrá reemplazar a Kenryu pero es bueno seguir adelante, ahora que pasará están atacando 😫 podrá Hayami llegar a tiempo, Derek al saber la noticia se ira con ellos Jaejoong y Junsu tambien estarán en la dulce espera 🤔😆 lo sabremos maaaas adelante XD
ResponderEliminarGracias